Apnea del sueño y diabetes tipo 2, una combinación letal

Las personas que padecen apnea del sueño corren un riesgo enorme de sufrir diabetes tipo 2. Este hecho se hace más comprensible si tenemos en cuenta que las frecuentes interrupciones de la respiración durante el sueño y los despertares violentos que provocan someten al cerebro y al cuerpo a un gran estrés.

• La apnea genera una gran cantidad de hormonas del estrés

Las personas que padecen apnea del sueño durante la noche generan una gran cantidad de hormonas del estrés como la adrenalina y el cortisol. Estas hormonas aumentan la presión arterial durante el sueño y liberan las reservas de azúcar almacenadas en el hígado.

• Hormonas del estrés que inhiben los efectos de la insulina

Al mismo tiempo, las hormonas del estrés inhiben los efectos de la insulina generada por el organismo. A largo plazo, estos fenómenos acarrean lo que se denomina «resistencia a la insulina», que es una de las causas principales de la diabetes tipo 2.

• La apnea agrava la diabetes tipo 2

Cuando el paciente ya padece diabetes tipo 2, una apnea obstructiva del sueño actúa como un «combustible adicional», ya que las interrupciones frecuentes de la respiración agravan esta enfermedad, ya que muchos diabéticos no logran equilibrar sus niveles de azúcar en sangre.

• Apnea y diabetes, un círculo vicioso letal

La apnea del sueño aumenta el riesgo de diabetes y la diabetes, a su vez, empeora el cuadro sintomático de la apnea del sueño. De este modo, se genera un círculo vicioso que puede resultar letal. En conjunto incrementan el riesgo de sufrir infartos o derrames, su combinación puede ser sumamente peligrosa.

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